Niñas madres que mueren

Niñas madres que mueren

Uno de los aspectos pendientes es el embarazo de menores, que principalmente afecta a las zonas más vulnerables. Para dar una idea, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) junto a la Secretaría Técnica de Planificación del Desarrollo Económico y Social (STP), realizó un estudio a nivel local.

1 de cada 20 niñas, de 10 a 14 años, en situación de pobreza tiene hijos y 1 de cada 10 niñas indígenas, de 10 a 14 años, ya es madre. Estos números impresionan al conocer que ninguna sola pequeña, del mismo rango de edad pero cuya familia pertenece a un nivel socioeconómico alto, tiene hijos.

«Se estima que Paraguay cada año pierde un 12% del PIB a causa de los embarazos adolescentes: Es un problema social, sanitario y también económico. 4.812 millones de dólares es la pérdida estimada del PIB, para el año 2018, como consecuencia de los embarazos adolescentes», señala este trabajo.

Ahora, con respecto a los datos recolectados del Ministerio de Salud y que tienen que ver con muertes maternas, en el 2018 fallecieron 75 embarazadas. Las principales causas de estos decesos fueron aborto, toxemia y hemorragias. Lo alarmante es que 1 de cada 4 de estos fallecimientos, corresponden a pacientes que tenían entre 10 a 19 años. Si se lo compara con el 2017, estos números se duplicaron.

El acceso a métodos anticonceptivos también tiene cifras en rojo ya que 1 de cada 10 mujeres de 15 a 49 años, no accede. La cifra en adolescentes es mayor y peor aún en mujeres indígenas. La planificación familiar es un derecho garantizado por la Constitución Nacional, pero jóvenes no pueden ejercerlo por la situación de vulnerabilidad que se encuentran.

«En términos de fecundidad, y como consecuencia de la desigualdad, la tasa específica de fecundidad de Paraguay en adolescentes es de 72 por cada 1.000; cuando el promedio mundial es de 44 por cada 1.000. Si desglosamos, en el quintil más pobre llega a 136 por cada 1.000, en tanto que en el quintil más rico es sólo de 18», destacó Rocío Galiano Marés, representante del UNFPA.