Según manifestó, cada uno de su personal de confianza debe garantizar resultados en el área que les toque en 90 días, para demostrar señales de cambio en la Contraloría General de la República.
Puso especial énfasis en la Dirección de Declaraciones Juradas que en los días de Enrique García como contralor, estaba la esposa del senador Dionisio Amarilla. En la gestión de la mujer no entregaron los documentos correspondientes de su familiar, pese al pedido de la Fiscalía.
Ante esto, aclaró que entre los primeros trabajos estará responder todos los pedidos de jueces o fiscales por declaraciones juradas. Además tratarán de trabajar en modificar la ley que los imposibilita a sancionar a aquellos servidores públicos que no entregan el documento.
Con respecto si debería ser completamente público el documento, refirió que solo algunos puntos del folio deben ser compartidos para la ciudadanía. No obstante, hay un choque entre leyes al respecto en donde la Ley de Transparencia exige toda información pública de un funcionario del Estado versus la Ley de Declaración Jurada que solo puede ser compartida cuando un juez o fiscal lo solicita.
«Se tiene que determinar qué información afecta la intimidad de la persona. Por ejemplo si soy socio de una sociedad anónima, si puedo declarar cuánto dinero en efectivo tengo en una cuenta o debajo de mi colchón, la individualización de los domicilios, donde uno vive… Pero sí creo que es importante saber con cuánto dinero un funcionario entró y luego salió», acotó para Algo Anda Mal de Noticias Paraguay.