La masacre sin precedentes ocurrida el domingo en la cárcel de San Pedro tuvo sus consecuencias contra el personal administrativo. ¿Y la responsabilidad política? Julio Javier Ríos no pretende dar un paso al costado. Así lo aclaró él quien se desempeña como ministro de Justicia.
Aseveró que se tomaron medidas inmediatas como la remoción del director de la penitenciaría de San Pedro y del director de Institutos Penales.
«Es neta responsabilidad de ellos», refirió Ríos acotando que se ocultó información al ministerio. Al ser consultado si pretendía dar un paso al costado, negó llevar a cabo tal acción.
También se le preguntó si al menos pretende dejar a disposición su cargo, así como el de su gabinete y respondió que está en un puesto de confianza que siempre está en manos del Presidente de la República.
«No puedo asumir un hecho ilícito cometido por funcionarios míos», indicó el Ministro de Justicia.
El domingo, reos tomaron por horas el control de la Cárcel de San Pedro resultando con la decapitación de cinco personas, la incineración de tres y la muerte a puñaladas de otros dos. Más de 15 heridos dejó este motin que se debió a un enfrentamiento entre el clan Rotela y soldados del Primer Comando Capital (PCC).
Para evitar cualquier tipo de venganza, se movilizó a los dos líderes del clan Rotela a la Agrupación Especializada. Esto provocó un motín en Tacumbú que acabó con 7 lesionados.