El exsenador Óscar González Daher y su hijo, el concejal luqueño Rubén González Chaves, fueron beneficiados con arresto domiciliario.
Fue el juez de Garantías Humberto Otazú quien dio vía libre a que ambos guarden reclusión en una vivienda de Asunción. Según justificó, se basa en la nueva reglamentación del Código Procesal Penal.
También fundamentó que el Ministerio Público, a través de la fiscal Liliana Alcaraz, ya cuenta con todos los elementos para probar los hechos punibles por el que imputó a padre e hijo, por lo que descarta que la medida alternativa podría obstruir la indagación.
Además, como el proceso está en la última fase de investigación y los sospechosos están a punto de compurgar la pena mínima por el hecho punible de enriquecimiento ilícito, se optó por este pedido de la defensa.
Como caución real, el exlegislador otorgó tres inmuebles y también están en juego propiedades de terceros.
González Daher y el edil están procesados por enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y declaración falsa. Además de esto, en contra de Daher pesa el caso de los audios del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados que también está en proceso de investigación. Ambos estaban recluidos en la Agrupación Especializada desde septiembre del 2018.