Los asaltantes simularon ser trabajadores de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) y llegaron a bordo de una camioneta con los distintivos de la institución hasta un comercio en la ciudad de Areguá.
A punta de arma de fuego tomaron de rehén a la mujer del propietario, a su hija y a un empleado. Se apoderaron de G. 5 millones y se dieron a la fuga.
Posteriormente, la camioneta utilizada para el atraco fue hallada a un kilómetro de distancia completamente incinerada.