Aunque contaban el dinero para pagar, dos jóvenes quisieron sacar provecho de un supermercado y robaron una caja de hamburguesas.
Agentes del Grupo Lince fueron alertados de la situación y tras una persecución lograron atrapar a ambos.
De manera insólita, el fiscal que tomó el caso en la ciudad de San Lorenzo, castigó a los jóvenes obligándoles a cocinar hamburguesas para todos los policías que se encontraban de guardia.