Este 26 de setiembre se recuerda el Día Mundial de Prevención del Embarazo No Planificado en Adolescentes. Las cifras a nivel local son alarmantes. En el 2018 se registraron 111.000 embarazos.
En este sentido, la cartera sanitaria se encuentra agotando instancias en el área de salud sexual y reproductiva en niñas y adolescentes.
Contra todos los esfuerzos, los números no disminuyen, ya que el año pasado se registraron más de 111.000 nacimientos, producto de embarazos de jóvenes de entre 10 y 19 años de edad.
En el caso de las más pequeñas, entre 10 y 14 años, se registraron 588 embarazos, lo que incluso constituye abuso.
El estado de gravidez en niñas y adolescentes repercute de forma sumamente negativa, ya que deben abandonar sus estudios y luego pierden la capacidad de continuarlos. Además, de la imposibilidad de conseguir trabajo.