La causa principal de la violencia contra la mujer es la desigualdad y el machismo tan arraigado en la sociedad que conducen a un sentimiento de poder delante de la mujer, refiere Lourdes Ostertag, psicóloga clínica especializada en violencia de género.
Otras características específicas del hombre agresor puede ser que provenga de una familia con historial de maltrato además de una baja tolerancia a la frustración y baja autoestima. “Pero son factores que se hubieran podido contrarrestar o neutralizar si hubieran tenido una educación de igualdad”, continuó la especialista.
Educar en igualdad de género significa no marcar diferencias durante la infancia. “Por ejemplo esos roles tan estrictamente estructurados donde a las nenas les regalan cocinitas, muñequitas, ollitas y jueguitos de té, sindicando roles de madre y amas de casa”, ejemplificó. Esto denota que en la vida real el rol de la mujer será criar un hijo y cuidar la casa.
En cambio el niño recibe pelotas significado de juego o autitos como sinónimo de libertad. «Es decir, me subo al auto con mi pelota mientras las niñas se quedan en casa cuidando a los hijos y preparando la cena para cuando el varón regrese», refirió ella.
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Para lograr esto deben haber juguetes que no estén tan diferenciados. Se los puede educar con juegos que estimulen su creatividad como rompecabezas, sin ningún tipo de sesgos. Inclusive, se lo puede incluir en la malla curricular del preescolar, recomienda Ostertag.
“Esta manera de vivir y educar a los niños hace que en el futuro estas conductas se repitan. De ahí viene esa enorme desigualdad y eso le da a él más poder sobre la mujer”, agregó la profesional.
Los celos son componentes y excusas psicológicas detrás del pensamiento de que él es dueño de esa mujer y ella es de su propiedad. Por eso ocurren hechos de feminicidios, justo en momentos de ruptura de relación, generalmente.
Las mujeres pueden acudir a la linea gratuita 137 del Ministerio de la Mujer o a la Policía o Fiscalía ante los primeros hechos de violencia.
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Mientras que los hombres pueden cambiar su conducta agresiva o invasiva con el apoyo de psicólogos, mediante terapias.
En este primer semestre del año 2019, hay menos muertes violentas contra mujeres. Cada feminicidio, en promedio ocurría cada 6,7 días en el 2018, mientras que ahora pasaron a ocurrir cada 8,1 días.
En el Departamento Central se registran la mayor cantidad de hechos de feminicidio, representando el 31,5% sobre el total del primer semestre del 2019.
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Por su parte, discriminando por edad, la mayor cantidad de víctimas tienen entre 21 a 30 años. La franja etaria corresponde a personas muy jóvenes y en edad económicamente activa. Le sigue el grupo comprendido entre los 30 a 40 años. Se puede afirmar según estos datos, que la mayoría de las victimas de feminicidio son jóvenes.
De acuerdo al reporte del Ministerio de la Mujer en julio no hubo víctimas, y desde el último caso que fue el 06 de junio de 2019 al primer caso que se volvió a dar, el 21 de agosto de 2019, fueron 76 días sin asesinatos. Desde la implementación de la Ley 5.777 / 2016, se observa por primera vez esta cantidad de días transcurridos sin ninguna víctima fatal.
Este mes de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, específicamente el 25, sin embargo, es oportuno hablar sobre este caso luego de la conmoción que causó la muerte de la joven Mayra de 23 años quien fue hallada sin signos de vida en el estacionamiento de un sanatorio. Presentó rastros de asfixia y golpes en todo el cuerpo.
VIDEO. Tenía rastros de asfixia y una hemorragia en la cabeza. Ante estos datos de forenses, se puede caratular el caso como feminicidio.#NPY #NosConectahttps://t.co/uAP7Ok87IL
— NPY Oficial (@npyoficial) November 4, 2019