Según la madre de Liz Gauto, asesinada a puñaladas el domingo por la noche, su hija era adicta a las drogas y debía G. 200.000 por consumo al presunto asesino que se dedicaría a la venta de estupefaciente.
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La madre refirió que no sabía sobre alguna relación sentimental entre su hija y el victimario, pero que aparentemente eran pareja casual.
