Un grupo de pobladores de un asentamiento de la zona conocida como Don Bosco de Ciudad del Este, se instaló frente a una vivienda que «no pertenece a nadie», pero que está ocupada por dos hombres que serían supuestos microtraficantes. Destruyeron la estructura.
Desde hace días los vecinos denuncian ante las autoridades la comercialización de estupefacientes en la zona y como los agentes no hicieron nada para atender el reclamo, estas personas hicieron justicia por manos propias.
La gota que colmó el vaso, según relató una denunciante, fue que hubo una balacera el domingo frente a niños que jugaban por el área. Nuevamente se notificó a la Policía y esta institución no respondió, justificaron, por lo que dicidieron incendiar la vivienda sin nadie dentro.
Cuando la patrullera llegó a la zona, la estructura estaba completamente derribada y hecha cenizas. «Le dijimos bien (a los supuestos microtraficantes) que se retiren a las buenas», dijo una pobladora.