Delincuentes ingresaron a un casino, simulando ser clientes. Uno de ellos incluso se sentó frente a una máquina para jugar y observar el movimiento.
En un momento estos sujetos muestran sus verdaderas intenciones al desenfundar sus armas y acercarse hasta los funcionarios para reducirlos.
«Se llevaron entre G. 10 a 15 millones», comentó un interviniente. Imágenes de circuito cerrado captaron el asalto.