En la madrugada del domingo pasado unos 76 reclusos de la Penitenciaría de Pedro Juan Caballero fueron liberados, convirtiéndose en una bochornosa fuga que sólo dejó en ridículo a las autoridades.
Hasta el momento, se realizaron varios allanamientos en la capital del Amambay, pero con escasos o nulos resultados, ya que sólo 9 reos lograron ser recapturados. Los fugados formarían parte de la peligrosa facción criminal Primer Comando Capital (PCC), pero de los cabecillas, nada se sabe.
Tras lo ocurrido, las fuerzas de seguridad se trasladaron hasta Pedro Juan para una intensa búsqueda, sin embargo, aún sin muchos resultados.
El Comandante de la Policía y su primer anillo, ya se retiró el miércoles, mientras que se maneja que otro grupo volverá a la capital este fin de semana.
Entre los procedimientos resaltantes, en la tarde de este jueves se allanó la vivienda del exjefe de seguridad de la cárcel, identificado como Matías Báez, de cuya casa se incautó documentación importante.
De acuerdo a la investigación, Báez estaba de turno cuando ocurrió la supuesta liberación de los reclusos y fue uno de los primeros hombres detenidos tras el hecho junto a otros 32 funcionarios del Ministerio de Justicia, incluido el entonces director del penal, Cristian González.
Los 32 fueron imputados por liberación de presos y fueron enviados a las penitenciarías de Concepción y Misiones, respectivamente.
Todos se abstuvieron de declarar ante el Ministerio Público.
Además, se allanaron varios hoteles del caso urbano pedrojuanino, en donde se constató que ciudadanos brasileños fueron hospedados sin la documentación necesaria, sin embargo, no se llegó a algún sujeto que forme parte de la lista de fugados.
Se sospecha que varias autoridades de justicia recibieron montos elevados de dinero para apañar la gran liberación.