El pasado 6 de enero había sido asesinado a Cirilo Quiñonez de 50 años, quien fue asesinado a puñaladas, en su domicilio en Capiatá. Tras la investigación policial, fueron capturados los principales sospechosos del crimen.
Los hermanos estaban trabajando como recicladores en la ciudad de San Lorenzo. Uno de los hermanos admitió ser autor del crimen y manifestó que se encontraba en ese momento bajos los efectos de la marihuana.
Explicó que la víctima habría violado anteriormente a su hermana y a una vecina. Además indicó que Quiñonez lo había amenazado para que no denunciara el hecho. Señaló que esa noche fue actuar contra el hombre con un machetillo sin su hermano. Sin embargo tras el hecho recurrió a su hermano y este lo ayudó para huir. Este ya contaba con antecedentes por tenencia de drogas y tiene orden de remisión a Tacumbú.
La víctima fatal contaba con antecedentes de violación a niños en el año 2007.
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