Una comitiva fiscal encabezada por la agente Carina Sánchez llegó hasta un vivienda que parecía tener un negocio de peluquería.
Cuando los intervinientes ingresaron al inmueble encontraron habitaciones en donde supuestamente explotaban a personas y también espacios que servirían para observar bailes.
En el interior de este establecimiento encontraron a dos mujeres que serían las propietarias. En su poder hallaron marihuana y cocaína.
Las supuestas víctimas no se encontraban en el sitio, pero de igual forma Sánchez ordenó alzarse con los celulares de las dueñas del local así como también extrajeron las imágenes de circuito cerrado.