Un hombre amenazado por traficantes de drogas de una ciudad de Río Grande do Sul, Brasil, fue atacado por dos sicarios mientras ingresaba a su vivienda con su hijo.
Ambos estaban en el patio cuando inició la balacera. El hombre corrió hacia el interior de la vivienda, quedando el menor en medio de este ataque.
Los criminales efectuaron más de diez disparos y el niño absorto observó todo este incidente tapándose el oído, según se ve en cámaras de circuito cerrado.
El padre resultó con heridas leves y ya fue dado de alta. Si bien el pequeño no resultó con lesiones, necesitará asistencia para superar esta experiencia traumática.
