Un hombre que trabaja para una estación de servicios fue interceptado por delincuentes que se movilizaban en un automóvil Toyota Runx.
Uno de los malvivientes baja y le apunta con su «arma». El playero simula retirar del bolsillo su billetera con la recaudación del día y aprovecha para forcejear con el ladrón.
El temerario funcionario se dio cuenta que los desconocidos utilizaban un arma de juguete. «Después de eso llamé a un compañero para atrapar a los sujetos», relató el valiente.
Los responsables de este atraco frustrado huyeron de la escena. Dejaron su pistola de juguete y una zapatilla.