Rafael Correa gobernó por una década Ecuador en el periodo 2007-2017 y fue condenado este martes por el tribunal de la Corte Nacional de Justicia ecuatoriana en una audiencia virtual, fue hallado culpable por el delito de cohecho agravado.
La condena es de 8 años de cárcel, además de perder todos sus privilegios políticos durante 25 años. El ex mandatario reside actualmente en Bélgica y desde ahí recibió la condena, el mismo calificó la resolución como una «payasada» y argumentó que todo se trata en realidad de una persecución política, por parte de Lenín Moreno.
La Justicia ecuatoriana condenó a Correa y a otras 17 personas más a la pena privativa de libertad por el caso de «Sobornos 2012-2016», que sería una red de corrupción montada durante el gobierno de Correa, que se encargaba de la financiación de las campañas políticas del partido Alianza País.
Así mismo, el órgano cuestionador consideró necesario el pago de una reparación económica que ascendería a 1.130 millones de dólares, el valor global de cada uno de los contratos que se entregaron dentro de esta trama de corrupción.
Finalmente Correa cuestionó duramente el juicio, señalando que estuvo plasmado de irregularidades el procedimiento en tiempo y forma además de poner en la balanza la imparcialidad de los jueces.