Fabian Martí era buscado por supuestamente ser el autor moral del hackeo de cuentas y apropiación de números celulares de dos periodistas y dos congresistas.
El mismo fue imputado por acceso indebido a datos, acceso indebido a sistemas informáticos y asociación criminal.
En su defensa el hombre alegó que no realizaba espionaje, que solo realizaba trabajos de asesoría.