Pasaron más de 60 días para que la pelota vuelva a rodar en una liga de elite mundial, la Bundesliga se reanudó con estrictas medidas de seguridad.
Quienes rompieron el hielo fueron el Dortmund y el Schalke 04, en el Iduna Park con una panorámica diferente, de los 80.000 espectadores promedios a un estadio vacío.
El protocolo de sanidad fue bastante estricto, los equipos ingresaron directamente al campo de juego, sin el tradicional saludo entre sus protagonistas.
Los balones llegaron al estadio sellados y desinfectados, quedando a un costado del campo para que los propios jugadores las recojan, ya que no se permiten los pasapelotas.
Los jugadores del banco no ocuparon su lugar habitual, si no fueron reubicados a las gradas vacías con un distanciamiento considerable.
En la cancha los goles fueron festejados sin abrazos y con saludos codo a codo, además de la nueva regla de los 5 cambios, fueron los visibles cambios en el campo.
En lo deportivo sin sorpresas, el El Bayern Munich, puntero del campeonato derrotó al Unión Berlín por 0-2, mientras que su escolta, el Dortmund goleó 4-0 al Schalke.