Marcelo Caballero, hermano tres de las víctimas, relató que el día del asesinato llegó a la escena del crimen y encontró a dos de sus hermanos desangrándose, pese a que los oficiales intervinientes le comunicaron que todos dentro de la casa estaban muertos.
Aseguró que fue él quien asistió a sus hermanos y acusó de omisión de auxilio a los oficiales que llegaron al lugar.