La joven Luz Dahiana Espinoza Colmán, sigue desparecida desde el pasado 18 de septiembre y no hay rastros de ella, su pareja Joel Guzmán, quien denunció la desaparición de su pareja cayó en varias contradicciones y es el principal sospechoso.
En la vivienda donde residían se encontró rastros de sangre humana en el baño, la cocina y hasta en la puerta. Los familiares de la joven y conocidos reclaman la lentitud de la investigación. «No se mueven los fiscales, nosotros mismos vamos a bajar a buscar evidencias», expresó el padre.
Días atrás una comitiva fiscal allanó la vivienda donde vivía la joven con su pareja en dos oportunidades, declarando que no encontraron evidencias, sin embargo cuando ingresó la familia por su cuenta encontraron rastros de sangre, tras una tercera inspección de las autoridades, se confirmó que efectivamente había varias evidencias y hasta inclusive hallaron el chip de la joven que daba pagado. Esta mañana fue designado otro fiscal más Lorenzo Lezcano para que sume al trabajo de investigación.