Benjamín Grassi expresó este viernes que el otoño tendría un ambiente cálido y además señaló que no se espera un invierno riguroso, seco y caliente.
Expresó que estas condiciones climáticas son propicias para incendios forestales, debido la escasez de lluvia, lo que también afectan a los ríos que podrían tener un nivel de agua por debajo de lo normal.
«El problema del invierno seco y caliente es que alienta a los incendios y ese es un gran problema; el 2020 nos demostró que no estamos preparados para los incendios, tenemos que prepararnos para los incendios con sistemas de alerta, hablar con la gente, con los municipios.
