Tanto fue el perjuicio contra Verónica, quien hace semanas le sustrajeron sus tres computadoras, que perdió su trabajo y una beca para ser máster que valía 12.000 euros.
Ella trabaja en marketing; sus computadoras valen una fortuna porque le sirvan para diseño y edición de videos e incluso la trajeron de Estados Unidos.
Verónica no se quedó con los brazos cruzados luego de denunciar el hecho por lo que analizó 609 archivos de video de circuito cerrado para seguir el trayecto del ladrón.
Con todos estos datos, presentó información sobre un sospechoso a la Policía, sin embargo, las autoridades hicieron de menos su esfuerzo. Básicamente le dijeron que el trabajo debían hacerlo investigadores profesionales. Detalló otros momentos amargos que vivió en medio de este proceso.
Lo que más le duele a Verónica es la pérdida de su beca de posgrado. «Me esforcé bastante. Si tenía una respuesta inmediata de la Policía, quizá hubiese alcanzado el masterado al menos», refirió.