Según publica el diario Última Hora, Juan Carlos Muñoz, empresario naviero y representante del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos, la situación del Paraná tras los temporales permitió que se vuelva a navegar luego de tres semanas.
«La verdad es que es buena noticia que caiga la mayor cantidad de lluvia posible. Esperemos que dure porque –según los técnicos– la sostenibilidad de esto no es de largo aliento, atendiendo a que en la cuenca del río Paraguay no está lloviendo, sino todo lo contrario, los registros en el Norte bajaron los hidrómetros 3 y 6 centímetros, Ladario y Corumbá», dijo a Última Hora.
Detalló que las últimas lluvias sostendrían el tráfico fluvial por dos a tres semanas y esperan que las lluvias continúen por lo que resta de octubre.
Agregó que el aumento del cauce del Paraná ayuda al río Paraguay a mantener sus niveles.
«Hay que tener en cuenta que el Paraná siempre actuó de tapón hacia la afluencia del río Paraguay. Le ayuda a mantener su caudal por más tiempo», precisó.
Por otra parte, negó que el estiaje de los ríos guarden relación con el sobrecosto de los fletes marítimos.
«El flete marítimo de contenedores se quintuplicó. Ese es un problema extrazona y fundamentalmente lo que ocurre es que hay menos barcos en el sistema y un enorme desbalance de contenedores», manifestó.