Un momento desesperante vivieron este jueves varios ciudadanos en el Hospital de Luque, donde la lluvia, y el agua acumulada hacía aún más agónica la espera en una extensa fila.
Inclusive, denunciaron que se daba la venta de turnos para acelerar la espera. Criticaron fuertemente la falta de organización de los funcionarios.
Por su parte el director ínterin de este hospital, Osmar Amarilla, declaró que hicieron todo lo posible en agilizar la fila.
Explicó que a diario atienden a cerca de 1.200 personas que aguardan sus turnos y que con la lluvia la situación empeoró.
Asimismo, señaló que trabajarán en coordinado con la Essap y la Municipalidad para ver el tema del agua estancada que es una historia que se repite en días de intensas lluvias.