El presidente del club, Héctor Melgarejo y el entrenador Humberto García, relataron a NPY todos los detalles de su heroico ascenso desde la última división del fútbol paraguayo.
Melgarejo manifestó que son «con orgullo un club de barrio» y que pueden «aportar bastante al fútbol».
Explicó que si bien sus recursos son limitados, eso no los detuvo en su meta de alcanzar la máxima división.
«No hay multimillonarios, no está gerenciado, se hace con el esfuerzo de cada día», dijo.
Sobre el partido contra Luqueño, refirió que para el club era «una final del mundo» y que se prepararon para lo que la importancia del encuentro exigía.
Por su parte, Humberto García rememoró los partidos de la promoción y reconoció que la actitud psicológica era clave, por lo que solicitó al club los servicios de un psicólogo deportivo.
«En el primer partido dijimos que no es un partido de tres puntos sino que les podía cambiar la vida», dijo García.
Agregó que para el segundo encuentro optó por conversaron con los jugadores de una forma más familiar y que los resultados estuvieron a la vista.
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