De acuerdo al relato de Ricardo Benítez, su madre –ya fallecida- le había dicho que debe luchar por sus sueños y superar todos los obstáculos para llegar a la meta.
“Mi mamá siempre me daba buenos consejos, uno de ellos es no abandonar mis sueños”, alegó.
“Mi papá tiene 80 años y no puedo ir a pedirle plata para pagar mis estudios, es costoso viajar todos los días y también es complicado seguir una carrera cuando venís de una familia humilde, pero no es imposible”, comentó.
Según Ricardo, durante la hora del terere o el mate, se dedica a estudiar, ya que cuenta con poco tiempo para dedicarse de lleno a la universidad.
“Hace 5 años trabajo en albañilería y además, estamos criando pollos con mi familia para generar ingresos. A veces, cuando llueve, en la obra no se trabaja y uno debe tener ingresos para ir a la facultad”, contó.
“Hubo momentos en los que quise dejar todo, veo a mis amigos que disfrutan de sus fines de semanas, yo no me puedo darme ese lujo, debo trabajar y estudiar”, dijo y añadió que es la tercera carrera universitaria que está siguiendo.
“Primero cursé la carrera de ingeniería electromecánica que abandoné en el segundo año, porque no estaba acreditado y luego elegí Radiología que terminé, pero no pude retirar mi título, por falta de recursos económicos”, manifestó.
El albañil dijo que cuando se elige una carrera, a pesar de las dificultades, uno no debe darse por vencido.