Una joven madre denunció que estuvo más de 24 horas en trabajo de parto y en tres ocasiones fue enviada de vuelta a la casa a la espera de que tenga un parto normal. Finalmente le realizaron una cesárea y la bebé nació con algunas complicaciones respiratorias y horas después murió. Ocurrió en el Hospital Materno Infantil Los Ángeles.
La madre de 21 años presentó los síntomas de un trabajo de parto el domingo por lo que en compañía de su pareja fue hasta el hospital donde realizaba su control prenatal. Sin embargo, fue enviada de vuelta a la casa para que retorne a las 18:00 horas de ese día en que le dijeron que recién podría nacer el bebé.
Volvieron en el horario combinado y a pesar de las fuertes contracciones volvió a ser enviada a la casa. En la madrugada del lunes retornaron y por tercera vez le indicaron que vuelva más tarde mientras la madre se quejaba de los dolores, ya en horas de la mañana retornó debido a que el estado de la madre se deterioraba.
Fue internada y sometida a un corte para auxiliar el parto debido a que ya estaba con 42 semanas de gestación. Dio a luz a una niña quien según el primer informe que recibieron los padres estaba en buen estado de salud pero en horas de la tarde fueron informados que presentaba complicaciones respiratorias y necesitaba de terapia intensiva que el hospital no disponía en ese momento.
El padre tuvo que rebuscarse por algún lugar hasta que el martes fue informado de que la niña no resistió y murió. Ante la presunción de que la bebé murió por una atención negligente o tardía el padre radicó la denuncia pública y el Ministerio Público intervino en el caso.
Ramona García, médica forense de turno diagnosticó luego de una primera inspección que causa probable de muerte es síndrome de aspiración meconial del recién nacido. Según los entendidos la bebé llegó a aspirar el liquido amniótico y las heces que le obstruyeron las vías respiratorias . La fiscal de turno Carolina Gadea anunció que espera el informe de los médicos para determinar las acciones a adoptar.