La defensa de Inocencio Ramón Denis Torres planteó la nulidad de todo el proceso que derivó en la primera sentencia dictada por un tribunal de Ciudad del Este con intenciones de que se realice un nuevo juicio oral.
La Cámara de Apelaciones conformada por los magistrados Marta Acosta, Raúl Insaurralde y Nilda Cáceres, confirmaron la condena de 27 años de pena privativa de libertad para el condenado, quien fungía de pastor evangélico. El mismo fue acusado por el abuso sexual de diez niñas indígenas asentadas en una localidad del Alto Paraná.
A pesar de la insistencia de los abogados del pastor, quienes alegaron la violación de la defensa y una supuesta actualización irregular de parte de dos nativos en calidad de perito, consultor y asistente no letrada, los camaristas entendieron que no hubo tales irregularidades que podrían haber contaminado la decisión por lo que ratificaron el primer fallo, que condena al hombre a 27 años de reclusión.
Los hechos ocurrieron en octubre del 2019, cuando las víctimas, algunas de apenas 4 años de edad, fueron llevadas en lugares alejados de la casa de sus padres en el marco de una supuesta actividad en su calidad de asesor espiritual.
El mismo aprovechaba estos encuentros para abusar de las niñas. Estas revelaron mediante estudios en cámara Gessel que eran manoseadas con frecuencia en sus partes íntimas por el religioso, quien las obsequiaba golosinas.