De acuerdo a los antecedentes, la mujer de 38 años maltrataba de manera sistemática a sus dos hijos de 11 años que son mellizos, tanto en la casa donde vivían en el km. 16 de Minga Guazú como en la vía pública.
La última agresión ocurrió el 10 de febrero pasado en la vivienda familiar y el episodio fue registrado mediante una grabación en el teléfono celular por un hermano mayor de las víctimas, quien presentó esta evidencia ante la unidad especializada en la lucha contra la violencia familiar.
Vecinos también confirmaron que era frecuente el maltrato de la mujer hacia sus hijos, a quienes también dejaba abandonados a su suerte, sin alimentos, todas las veces que estaba bajo los efectos del alcohol.
Ese día el denunciante explicó que estaba en la casa conversando con sus hermanos menores, cuando llegó la mujer quien estaba en estado de ebriedad y apenas ingresó a la casa, comenzó a amenazar y maltratar a los menores de forma verbal cuando uno de ellos lloró. Allí tomó un cuchillo y los niños empezaron a correr por la casa siendo perseguida por la progenitora, quien en todo momento les amenazaba para que se callen, les arrojó una zapatilla y un objeto de hierro hasta que los menores entraron bajo una mesa mientras el hermano mayor intervino para sacarle el puñal y realizó la filmación de lo ocurrido que fue anexado como evidencia de la denuncia.
El joven también relató que al igual que otra hermana mayor, abandonó la casa por los maltratos que sufría en manos de su propia madre y que el padre también era víctima de violencia.
La fiscal Rocío González intervino en el caso y dispuso la detención de la mujer y presentó la imputación por violencia familiar, violación del deber del cuidado y abandono. La agente también solicitó la prisión de la mujer y la adopción de medidas de seguridad y protección a favor de las víctimas mediante la Defensoría de la Niñez y el centro de atención a víctimas del Ministerio Público.