En contacto con NPY, el experto en ciberseguridad, Miguel Ángel Gaspar, explicó que esta decisión tomada por Estados Unidos, el Consejo de la Unión Europea y el Gobierno de Canadá, guarda relación con asuntos de soberanía digital y tecnológica.
Especificó que la disposición va para los funcionarios gubernamentales, quienes no podrán tener la aplicación en dispositivos de uso oficial.
«La soberanía digital es la manera en que el Estado gestiona y protege los activos digitales de la Nación y los datos personales son parte de esos activos», explicó.
Refirió que en el caso de Paraguay, más del 80% de los activos digitales se encuentran en manos de plataformas extranjeras sin ningún tipo de gestión.
Gaspar explicó que en China existe una legislación denominada «Ley de Inteligencia Nacional», que en sus artículos 7 y 14 expresa que los proveedores de productos y servicios de China pueden brindar al Gobierno de ese país datos en caso de que la seguridad nacional se vea amenazada.
El experto recordó que la firma china BytDance, propietaria de la popular aplicación, reconoció que en diciembre de 2022 «espiaron desde Pekín a periodistas» en el marco de la Ley de Inteligencia.
Gaspar hizo hincapié en la interrogante de por qué en Paraguay no se cuenta con mecanismos y recursos para poder medir en qué estado de vulnerabilidad se encuentran los activos digitales del país.
«Hicimos esta pregunta a la gente del MITIC, no solo por TikTok sino por hardware de origen chino que fueron prohibidas en otros países porque demostraron que recolectan más información de la que está acordada en sus convenios de servicio», dijo.
Detalló que, en el particular caso de TikTok, sociedades de psiquiatría y psicología hablan de esta aplicación «como una nueva droga digital» y que debería «prohibirse» en el ámbito estudiantil.
«Cuando entramos en el terreno de las ciberadicciones, también nos damos cuenta que como sociedad tenemos una deuda muy grande con la salud mental. Durante la semana que empezaron las clases, recorrimos colegios y hemos hecho experimentos con los directores y hemos demostrado que esta situación se generó primero en redes sociales antes que en la vida física de los estudiantes y que estamos dejando de lado el análisis de esas situaciones», mencionó al tiempo de instar a la sociedad a debatir sobre soberanía digital así como salud digital y mental.