El fallo fue dictado por el tribunal presidido por la magistrada Zunilda Martínez, que estableció la calificación final como homicidio simple, pero teniendo en cuenta que fueron cuatro las víctimas del crimen, los años llegaron a los 28 años de prisión.
Los antecedentes refieren que el ahora condenado Miguel Ángel Caballero, de 23 años, el 12 de enero del 2020 estaba en la casa de su hermana, en el barrio Tres Fronteras de Presidente Franco, junto con otras dos personas y las víctimas fatales identificadas como Julián Samuel Duarte, Edilio Fernando Villalba, Carina Soledad Villalba y Edgar Villalba.
Alrededor de las 2 de la madrugada, ya del día 13 de enero, se desató una discusión y los asesinos rociaron con disparos de pistola a los ahora fallecidos. Otro coautor y en estado de rebeldía es Gabriel Ramírez. Según el tribunal, se demostró que Miguel Ángel y el otro involucrado arrastraron los cuerpos sin vida desde la casa hasta un baldío y luego desecharon las evidencias de la escena del crimen.
A las 5 de la mañana el ahora condenado entregó la llave de la casa a su madre, a quien llegó a decir que ocurrió algo muy feo y que debía huir. Tiempo después el hombre fue detenido y de su poder fue incautada una pistola calibre 9 milímetros que según las pericias es el arma homicida.
Según la investigación víctima y victimarios se dedicaban al contrabando y el paso de mercaderías de todo tipo por el río Paraná hacia territorio brasileño e incluso argentino. Diferencia a causa de la ganancia de esta actividad ilegal habría sido el detonante de la mortal discusión.
La fiscal, que estuvo como acusadora, Viviana Sánchez, también consiguió demostrar que los disparos se dieron de frente hacia atrás y un testigo declaró como anticipo jurisdiccional de pruebas que Miguel Ángel estuvo en el lugar, inclusive pudo rescatar fotografías que los participantes del encuentro se sacaron antes que se desatara el cuádruple homicidio.