Guzmán Florentín es dueño del automóvil Toyota Allion con el que atropellaron y mataron a Katia Monserrath Brítez Torres (20) este domingo en Lambaré. El mismo sostuvo que el vehículo le fue robado por Osvaldo Luis Zaracho Fernández, el principal sospechoso del feminicidio en Lambaré, Departamento Central.
Aseguró que la situación fue muy angustiante para él, ya que le provocó incluso ataques de llanto por lo ocurrido, temiendo por un proceso judicial. “Pensé que todo iba a venir sobre mí”, confesó el propietario del rodado involucrado en el caso.
Florentín relató que se encontraba compartiendo con amigos en una quinta en Capiatá y en el grupo también se encontraba el presunto feminicida, a quien se refirió como un conocido del colegio.
Pasadas las 05:00 de la mañana, él entregó las llaves del auto a un amigo e ingresó a la casa y que minutos después se llevó su vehículo.
“Mi amigo llaveó todo el auto y salió detrás de él (Zaracho). Se fue a orinar y detrás de él se fue Zaracho y le pidió la llave. Le mintió para obtener la llave. Veo que entró a mi auto y que se prendieron las luces. Salgo afuera y mientras, él ya entró en reversa y salió a toda puta de ahí (sic). Yo grito que me están robando el auto”, detalló con calma.
En la entrevista, Florentín se refirió al supuesto autor del feminicidio como un conocido, admitió que estaba al tanto de que tenía prisión domiciliaria, pero sostuvo que él, al igual que sus amigos, no estaba muy pendiente de ello.
Sin embargo, confesó que no era la primera vez que Zaracho tenía problemas con su pareja. “Con sus amistades no había problemas. En las relaciones era diferente”, agregó.
Osvaldo Zaracho fue imputado por el feminicidio de Katia Brítez, quien falleció el último domingo tras ser atropellada varias veces por su ex pareja. El joven se expone a una pena privativa de libertad de hasta 30 años de cárcel.