El gobierno de Brasil implementó una nueva medida que prohíbe el uso de celulares en todas las escuelas públicas del país. A partir de ahora, los estudiantes no podrán utilizar sus teléfonos móviles ni dentro del aula ni durante los recreos.
La decisión busca mejorar el ambiente educativo y minimizar las distracciones causadas por los dispositivos electrónicos. Sin embargo, la norma establece excepciones: los alumnos que necesiten el celular por razones de “accesibilidad”, para “atender condiciones de salud” o con fines pedagógicos podrán seguir utilizando el dispositivo.