Con una pizarra improvisada y con sillas en medio de la calle Tacuarí, frente al Indert, los hijos de los campesinos que se manifiestan durante varias semanas comenzaron este lunes a dar clases en la intemperie pese al calor.
Docentes de su comunidad llegaron a hasta Asunción para que los niños puedan retomar sus estudios, preocupados por su situación académica.
La directora de la escuela exigió que el presidente Santiago Peña resuelva la situación de la comunidad que exige la regularización de sus tierras para poder labrarlas y darles a sus hijos un mejor futuro.