El Hospital de Clínicas de San Lorenzo atraviesa una grave crisis en sus servicios de diagnóstico por imágenes. Desde noviembre de 2024, el único mamógrafo del centro médico está fuera de servicio, afectando a cientos de pacientes, en su mayoría mujeres, que necesitan estudios de detección temprana del cáncer de mama. A esta problemática se suma el hecho de que los dos tomógrafos del hospital tampoco están funcionando.
Según denunciaron pacientes, ya llevan más de seis meses esperando la reparación de las máquinas. El principal obstáculo es la falta de presupuesto para arreglar equipos que ya superan los diez años de uso, de acuerdo con las autoridades del hospital.
“La situación es muy preocupante”, expresó una de las funcionarias del área de tomografía. Indicó que uno de estos estudios puede costar alrededor de G. 800.000 en centros privados, un monto inalcanzable para la mayoría de los pacientes que acuden al hospital, quienes en su mayoría son de escasos recursos.
El personal de salud lamenta profundamente las condiciones precarias en las que se ven obligados a trabajar y piden a las autoridades correspondientes una pronta solución. Mientras tanto, cientos de personas continúan a la espera de atención y diagnósticos vitales para su salud.