Federico Olmedo, guardia de seguridad de más de 10 años de antigüedad, fue hallado muerto por su jefe en el interior del negocio de venta de gas que custodiaba. El hecho se habría producido durante la madrugada de este lunes en Ciudad del Este.
El hombre tenía tres impactos de bala en el pecho y su escopeta estaba cerca de él. Lo llamativo es que los asesinos no robaron nada del sitio.
Olmedo vivía frente a su trabajo. Los familiares están sorprendidos por este hecho ya que alegan que nunca tuvo conflictos con terceros.
«Estaremos analizando las imágenes de circuito cerrado de las casas vecinas para tener más dato», dijo el comisario Miguel Cañiza.