La Fiscalía imputó a los agentes penitenciarios José Carlos Alfonso Torres, Adrián Isfrán Báez, Benicio de Jesús Romero Aguilar, Ariel Gustavo Marecos Benítez, y Jonathan Nicolás Barúa Chamorro, este último se desempeñaba como encargado del sistema de monitoreo.
Según la imputación del fiscal, Alcides Giméznez, todos ellos están involucrados en la liberación de los ocho reos, de los cuales uno ya ha sido recapturado, Fredy González, quien aparentemente sufrió una lesión al saltar desde una torre. Las personas que se fugaron eran consideradas de alta peligrosidad y habían sido trasladadas a esta penitenciaría por ese motivo.
Se evidenció una “omisión deliberada” en el trabajo que debían realizar, ya que durante aproximadamente 40 minutos nadie controló si los reclusos estaban en sus celdas. Los funcionarios justificaron su ausencia indicando que estaban sirviendo agua y comida, o realizando otras tareas, comentó el fiscal.
El Ministerio Público también convocó al exdirector y al ex jefe de seguridad del centro penitenciario para una indagatoria. Ambos explicaron la forma en qué trabajan, jerarquía y funciones que cumplen cada uno de los departamentos. Están en carácter de investigados, aunque hasta el momento no han sido imputados.
Las autoridades policiales se encuentran trabajando para recapturar a los siete reos prófugos, considerando la posibilidad de que hayan cruzado la frontera hacia Brasil o Argentina, dada la cercanía con la zona. A pesar de los operativos policiales, hasta el momento no se han reportado nuevas recapturas.