El siniestro se registró en una humilde vivienda ubicada en una zona rural de la localidad, y las llamas se extendieron rápidamente, consumiendo por completo la casa.
Los bomberos voluntarios acudieron al lugar y lograron controlar el fuego, pero lamentablemente, los pequeños ya habían muerto calcinados entre los escombros. Según informaciones proporcionadas por el teniente Tiago Carvalho, los padres de los niños se encontraban trabajando en una plantación de mandioca en el momento del incidente.
La Policía Civil, tras una investigación preliminar, detuvo a una mujer de 19 años, madre de uno de los niños, por supuestas contradicciones en su versión de los hechos. La mujer fue detenida mientras se profundiza en las circunstancias que rodean la tragedia.